Cómo logré equilibrio entre productividad y vida (y cómo tú también puedes hacerlo)

Por primera vez en mucho tiempo, siento que encontré un equilibrio real en mi vida. No significa que no haya presiones, duelos o retos, sino que aprendí a darme prioridad sin abandonar mi productividad.

La semana pasada fue intensa: mucha presión laboral, un proceso personal que me costó cerrar después de años, y nuevas puertas que se abrieron al mismo tiempo. Estaba agotada, pero también profundamente satisfecha porque logré mantenerme en pie gracias a un aprendizaje esencial: escucharme a mí misma.

Y mientras atravesaba este proceso, me descubrí aplicando muchas de las recetas que comparto en mi libro Siempre estás a tiempo. Fue como comprobar que el camino que enseño también me sostiene a mí.

El secreto: equilibrio con consciencia

El equilibrio no significa tener todo bajo control, sino aprender a moverte con armonía entre lo que necesitas y lo que debes hacer. Es poder trabajar, cumplir metas, cuidar de otros, pero sin dejarte en el olvido.

Es entender que tu cuerpo habla, tu mente también, y que cuando los escuchas, el caos se transforma en calma con propósito.

Método 3R para alcanzar el equilibrio

Aquí te comparto una herramienta práctica que puedes empezar a aplicar hoy mismo:

1. Reconocer

Tómate 5 minutos diarios para preguntarte:

• ¿Qué siento en este momento?

• ¿Dónde estoy poniendo mi energía?

• ¿Qué me está drenando y qué me está nutriendo?

Escribir estas respuestas en un cuaderno te ayuda a hacer visible lo invisible.

2. Reorganizar

Con lo que reconociste, ajusta tu día:

• Suelta lo que no es urgente.

• Prioriza lo que de verdad importa (trabajo y vida personal).

• Crea microespacios de autocuidado: un paseo, una infusión, un descanso breve.

  
  

3. Recargar

Al final del día busca un ritual que te devuelva energía:

• Leer unas páginas.

• Meditar 10 minutos.

• Escuchar música que ames.

• Respirar profundo y agradecer algo pequeño.

Este método no elimina los problemas, pero cambia la forma en que los enfrentas.

Una invitación personal

Si hoy te sientes cansada(o), desbordada(o) o atrapada en la rutina, recuerda esto: siempre estás a tiempo de volver a ti.

No tienes que hacerlo sola(o); hay herramientas, libros, talleres y mentorías que pueden acompañarte a rediseñar tu vida con consciencia.

Yo lo viví y sé que tú también puedes lograrlo.